#EnQuéEstamos

Por: Daniela R. Gómez Isaza

Paulina Betancur Guerra de 22 años quería estudiar medicina humana. Pero al hacer un semillero en esta área, se dio cuenta de que realmente no la apasionaban los hospitales, que la hacían sentir inquieta y le parecían ambientes tristes. Durante un tiempo, reflexionó sobre dos temas que le atraían:, la medicina y los animales, y decidió estudiar una carrera que abordaba ambos.

Pensó en los gatos y perros que podría ayudar y en 2017 decidió hacer un semillero de esta carrera en la Universidad CES, en el que se enamoró del programa. En el 2018 ingresó a estudiar Medicina Veterinaria y Zootecnia en la institución, un lugar que define con calidad académica sin dejar de tener un componente humano y que, además, ofrece actividades de simulación y prácticas.

En un momento decisivo de su carrera universitaria, se adentró en la materia de Salud y Producción Bovina, donde conoció sobre la reproducción animal, un campo que hasta ese entonces no contemplaba en su escenario profesional.

Conocer esta área significó un cambio drástico para Paulina Betancur. Al principio, se había interesado por las pequeñas especies como perros y gatos, pero en el transcurso de la carrera se deslumbró con las especies grandes como los rumiantes, que son aquellos que tienen la capacidad de regurgitar su alimento y masticarlo por segunda vez como las vacas, cabras, ovejas, venados, búfalos y toros.

“Las personas creen que un médico veterinario no puede dedicarse, por ejemplo, a estar en un laboratorio haciendo diagnósticos moleculares para la reproducción animal, que sería por ejemplo hacer embriones in vitro y recolecta de semen de increíbles especies como búfalos y toros. Eso es lo que más me apasiona, estar en el laboratorio haciendo análisis sobre estas especies, más que en el campo”, aseguró la estudiante.

Esta joven también estudia Ingeniería Biomédica en la Universidad CES. En primera instancia quería fusionar sus conocimientos como médica veterinaria con la creación de prótesis y órtesis para los animales que tenían problemas de movilidad en sus extremidades. Luego conoció la relación de la biotecnología y la reproducción animal, profundizando en el mejoramiento genético, el diagnóstico molecular y la reproducción bovina.

Con estos conocimientos, Paulina Betancur espera contribuir a la literatura científica de la salud y reproducción bufalina, que es una especie de la que, según ella, casi no se ha investigado en la actualidad. Con estas prácticas, también se podría recolectar el semen para la reproducción de embriones y preservar las especies y mejorarlas genéticamente.

La estudiante estuvo los primeros cuatro semestres de la carrera en el Grupo de Estudio en Cabras, Ovejas, Búfalos y Bovinos (Caobbo) y ha hecho parte de las monitorías, ofreciendo su ayuda a los estudiantes de semestres más bajos en las materias de Farmacología, Toxicología y Microbiología.

En las prácticas de campo, recuerda la primera vez que tomó una muestra de sangre en la materia de Semiología en la Finca Villa Elisa de la Universidad CES, un espacio en el que se desarrollan actividades prácticas con los estudiantes.

“El objetivo era sacarle una muestra de sangre a los caballos, que son animales que me dan miedo. Es importante cuidar la higiene de la aguja, porque si está sucia puedes transmitirle bacterias al animal. Lo que hice fue presionar la zona final del cuello y esperar a que la vena yugular se brotara. Apareció el momento perfecto y lo hice. Me sentí muy feliz”, aseguró la estudiante.

Su sueño es viajar y hacer una maestría o doctorado en Brasil. Aprender sobre reproducción bovina y también le gustaría ser docente de universidades, porque la educación es otro tema que la mueve por dentro.

Actualmente, vive en el sector de la Loma de las Brujas con su mamá, su hermano y su recién llegado perro Kodah. Es la primera mascota que tiene y está emocionada y a la vez ansiosa, “aunque suene irónico para alguien que estudia medicina veterinaria”, mencionó entre risas.

Sus escritores favoritos son el antioqueño Héctor Abad Faciolince, el bogotano Mario Mendoza y el checo Milan Kundera, con su obra La insoportable levedad del ser. Le gusta hacer caminatas naturales, ir a charcos y al teatro.

Le encanta el cine independiente y admira al director japonés Hayao Miyazaki de Studio Ghibli. Su interés y pasión por el cine es tal, que la película El castillo ambulante solo puede verla en soledad, nunca se la ha visto en compañía de nadie y no podría hacerlo.

A los estudiantes que quieren estudiar Medicina Veterinaria y Zootecnia en la Universidad CES, les dice que no tengan miedo de presentarse a lo que les apasiona. Es una carrera retadora, dice que los animales no son predecibles, pero es un camino en el que se encontrará la satisfacción de hallar un amor desinteresado por parte de estos seres. “Para mí, los animales son los seres que tienen las almas más puras”, comentó Paulina Betancur Guerra.

¿Y tú qué esperas para vivir esta aventura?